Un formoseño que empieza a pisar fuerte en el Chaco paraguayo

Historias en primera persona: Se quedó sin trabajo en Formosa y se radicó en el Chaco Paraguayo donde desarrollo para una empresa multinacional las primeras 10 mil hectáreas de agricultura en Mariscal Estigarribia. Hoy tiene dos hijos y lleva adelante un negocio inmobiliario, en medio de lo que el boom de las inversiones agropecuarias.

En una extensa charla con Agroperfiles, el joven formoseño cuenta parte de su vida y las perspectivas de crecimiento basadas en darle mayor libertad a quienes producen y menores cargas impositivos, con acompañamiento a los que buscan exportar sus productos.

Gonzalo Zalazar tiene 39 años. En el 2006, perdió su trabajo y emprendió una aventura, yendo al vecino país de Paraguay, que terminó marcando su vida.

Corría el 2005 y Gonzalo trabajaba como representante y distribuidor de una reconocida marca de productos para el engorde vacuno en Formosa capital. La empresa radicada en Malabrigo,  provincia de Santa Fé, comenzó a tener inconvenientes en cuanto a la logística y el flete para llevar sus productos hacia la provincia del norte argentino.

“Ahí me quede sin trabajo, con un mar de incertidumbre, con los ánimos por el piso”, cuenta a este portal, y agradece ser parte del Grupo Agroperfiles integrado por productores y técnicos “con los que comparto información y vivencias”, dice .

Ante este escenario, dentro de la búsqueda de alternativas, tomó contacto con su hermano que es contador público de profesión, recibido en la universidad de Asunción, y que hacía varios años atrás, fue contratado por un amigo de la comunidad menonita que instaló un Estudio contable en el Chaco paraguayo.

“Mi hermano me habló, y me propuso venir aquí a trabajar con un cliente de ellos que era una zona ganadera, que era muy importante en la zona,  y obviamente me vine”, recuerda.

Así, se radicó en las colonias menonitas del chaco central o región occidental de ese país.

COMO COMENZO SU TRABAJO

Gonzalo cuenta que trabajó entre el 2006 y 2009, en un gran proyecto de desarrollo de agricultura bajo riego con agua de lluvia, donde se hicieron reservorios de 300 a 400 mil metros cúbicos de capacidad, en unas 50 hectáreas de captación de agua caída.

Luego llegó la empresa Cresud, que se fusionó con la empresa Carlos Casado, donde nace Cresta, y allí presenté mi currículo, donde fui seleccionado entre quince aspirantes, por obra de Dios, a quien le atribuyo mi llegada y todo lo que me dio”, dice como hombre de fe.

Allí trabajó hasta que en el 2015 ingresa a ese holding empresarial una subsidiaria de Cresud que es Brasil Agro, que se quedó con el 50% de las acciones de la empresa, tras lo cual dejó de trabajar allí.

“Pensaba jubilarme allí, porque yo desarrollé con orgullo las primeras 10.000 hectáreas agrícolas  y pude ver la primera cosecha en 2010 porque allí no había prácticamente nada en Mariscal Estigarribia, pero al final me retire en el 2015”, recuerda.

Luego ingreso en un negocio de producción y venta de carbón de quebracho blanco, y al año de eso comenzó nuevo emprendimiento inmobiliario con un socio menonita.

EL NEGOCIO INMOBILIARIO

Gonzalo Zalazar en sociedad con un menonita, Kenneth Derksen, fundan una inmobiliaria “Tierras del Chaco”, en la actualmente trabaja. “Esto nos lleva a conocer mucha gente más de la que conocíamos, recorrer toda la región occidental de punta a punta, poder brindarle la mejor asistencia técnica agropecuaria al inversor y para que pueda ser realmente la mejor de las inversiones en el rubro inmobiliario a la hora decidir”.

POR QUE INVIERTEN EN PARAGUAY

Dice que el negocio inmobiliario le permitió desarrollarse y a la vez poder observar las razones por las cuales hoy muchos elige Paraguay para hacer inversiones.

“Amo mi país, y sueño que algún día podamos trabajar como se trabaja ahora aquí en Paraguay, donde los gobiernos apuestan al desarrollo, porque ven más allá”, le dice a Agroperfiles.

Menciona entre las razones del por qué muchos invierten en Paraguay a que existe un mejor clima de inversión en la región (Mercosur); abundante energía eléctrica a precios competitivos; crecimiento estable y sostenido

Señala Gonzalo que Paraguay tiene un régimen tributario competitivo, ua creciente diversificación económica, una inflación controlada y disciplina fiscal y macroeconómica. A la par, habla de la fuerza laboral joven y a precios competitivos, donde el 66% de la población es menor a 35 años

“Aquí se destaca—agrega—los incentivos para las inversiones nacionales y extranjeras, y hay un acceso a mercados con ventajas arancelarias claves y rescata que hay una alta demanda anual de infraestructura.

VALERIA, LA MUJER QUE LO AYUDO EN TODO

Cuenta a Agroperfiles Gonzalo Zalazar que conoció allí en el Chaco paraguayo a una mujer de esa nacionalidad, de nombre Valeria, con quien tiene dos hijos, Genaro de 8 años, y Valentino de 10 meses.

“Mi esposa se llama Valeria, paraguaya ella y es la que realmente termino por estabilizar mi vida y acompañarme en todo lo que emprendí desde hace 10 años”, cuenta con orgullo.