No todo está perdido
Desafiándole a la adversidad, este joven pequeño productor hortícola que pone los huevos en varias canastas, logró cosechar un lote de zapallos coquenas, cuando lo daba todo por perdido.
Es Sebastián Álvarez, a quien el clima lo viene castigando desde un año antes de la pandemia allí en la zona de Las Breñas, Chaco. Primero fue la inundación, y luego la sequía.
La verdad que no esperaba cosechar algo, porque estaba muy feo, todo quemado por el sol, le contó a Agroperfiles. Esta actividad es complementaria a la cría de “gallinas felices”, es decir, sin jaula. “La venta de huevos ha aumentado, pero no podemos producir más porque estamos muy limitados”, dice.
El lote sembró el 12 de enero, en unas12 hectáreas que alquiló. El 15 de enero me llovió 200 mm en un rato, quedo todo bajo agua, después vinieron todos los calores, se cocinó casi todo.
“NI GANAS DE IR A VER EL LOTE TENÍA”
“Ni ganas de ir a ver el lote. Al último lo coseche más porque no hay zapallos en la zona y por dar laburo a la gente que siempre trabaja conmigo”, contó mientras cargaban en un acoplado los frutos que tienen por destino el mercado local.
“Un año bastante complicado. Pero tenemos que seguir apostando. Ahora estoy largando por tercera vez la siembra de verduras e instalando los riegos de a poco. Demás cuesta todo pero no le aflojo”, expresa convencido.
NECESITA UN CRÉDITO PARA “DOS ACTIVIDADES “ARRANCAR FUERTE”
“Necesito un buen crédito, para impulsar lo que es las gallinas y horticultura”, dice cuando le preguntamos cuáles son sus necesidades puntuales.
Dentro de las obras que necesita para su predio, es la instalación de la energía eléctrica y poder comprar materiales para seguir trabajando y dando mano de obra a los vecinos.
“Necesito un financiamiento para comprar mangueras, aspersores, bomba. Y para hacer cultivo todo el año los invernaderos, porque así es imposible producir en verano, aunque me sobra el agua pero necesito hacer la red interna para riego”, contó.
