LOS COMPRADORES DE FORRAJES TIENEN QUE TOMAR ALGUNAS DECISIONES. ¿SEGUIRÁ SUBIENDO EL MAÍZ?
Por Fernando L. Perosio (*)
Los precios de los forrajes han experimentado un repunte sustancial durante los últimos 60 días, debido a una gran cantidad de nuevos eventos, que uno hubiese pensado que no ocurrirían. A mediados de agosto, parecía que había una gran cantidad de suministros proyectados, tanto a nivel nacional como mundial. La urgencia de asegurarse el inventario era baja. A finales de octubre, y los nuevos máximos contractuales establecidos en los futuros de soja y maíz reflejan lo contrario.
La pregunta para los compradores de forrajes es, ¿aseguran ahora inventarios a largo plazo, o este repunte es algo que vendrá y se irá, y su paciencia se verá recompensada al no hacer nada? No hacer nada es una estrategia intencional.
Esta estrategia suele funcionar bien para los compradores de forrajes, ya que históricamente los agricultores producen más de lo que el mercado necesita y, en consecuencia, los precios tienden a mantenerse relativamente bajos. Este año es diferente. Los mínimos de la cosecha llegaron temprano y los precios se han movido directamente hacia arriba.
LOS FUTUROS DEL MAIZ
Los futuros de maíz de diciembre tocaron fondo en u$s 3,20 y ahora han subido un dólar. Algunos eventos que ocurrieron fueron fuertes vientos en Iowa, condiciones de sequía en Iowa y partes del Oeste del cinturón maicero, fuertes compras chinas y, lo más importante, un flujo masivo de dinero que cambió de posiciones cortas futuros a largos, ya que los fondos de commodities, reconocieron la disminución de la oferta.
LA INCERTIDUMBRE CON CHINA
Agregue a eso, la incertidumbre con China, ya que el clima (específicamente, dos tifones e inundaciones en agosto) pueden haber reducido la cosecha entre un 5% y un 10% (<< producción 260.000.000 tons). Al mismo tiempo, China, con el fin de cumplir con el acuerdo comercial firmado en enero, ha dado un paso al frente y ha comprado volúmenes masivos de soja, y más maíz de lo previsto. La manada de cerdos en China está creciendo más rápido de lo previsto, y la tormenta perfecta de suministros decrecientes en China, y una demanda creciente, han creado un entorno en el que los precios pueden seguir subiendo.
¿COMPRAR O ESPERAR?
Como comprador de productos de maíz y proteínas, la pregunta que enfrenta ahora es: ¿Debería subirse a bordo y comprar, o esperar? Según los estándares históricos, el maíz y la soja todavía pueden considerarse baratos. Por lo tanto, asegure su inventario o, como mínimo, compre opciones de compra. La incertidumbre climática en América del Sur podría ser primordial. Un comienzo tardío de la temporada de siembra, debido a las condiciones secas, sugiere que China podría continuar comprando productos estadounidenses, hasta que se alivien las preocupaciones climáticas.
Como mínimo, las cosechas se recogerán más tarde de lo habitual. Si compra inventario, es natural preocuparse de que esté comprando cerca de la cima. La recomendación entonces sería proteger su inventario comprado usando opciones de venta. La clave de todo esto es un enfoque estratégico en un mercado que tiene circunstancias muy inusuales.
EL IMPACTO POTENCIAL DEL COVID
Ni siquiera hemos mencionado el impacto potencial de que crezca el COVID-19. Tenga conversaciones estratégicas con su asesor de mercado. La planificación previa y la estrategia pueden contribuir en gran medida a aliviar el pánico y el estrés, independientemente de la dirección en que vayan los precios. Asegúrese de tener discusiones centradas en sus objetivos y necesidades, junto con sus requisitos de flujo de efectivo.
La retrospectiva, puede decirnos que tener paciencia y no hacer nada, podría ser una gran estrategia, o un desastre. Es posible que los mercados estén comenzando lo que podría ser un repunte no visto desde la sequía de 2012.
(*) Fernando L. Perosio es consultor, Trading & Brokering, miembro de Gurú Ganadero y Gurú Clima & Cosechas