Karnatz: “Lo que impone la Unión Europea, atenta contra la soberanía nacional”
Tal como se viene indicando, el Parlamento Europeo aprobó por amplia mayoría una ley que buscará cerrarle la puerta a la importación de productos que procedan de zonas recientemente deforestadas. A partir de esta ley, Europa no aceptará productos que procedan de tierras deforestadas ni que hayan provocado deforestación después del 31 de diciembre de 2020.
“Lo que impone la Unión Europea, atenta contra la soberanía nacional, porque tanto Brasil como Argentina estamos en zona amarilla casi roja por este tema”, dijo en declaraciones al programa El PUENTE que se emite por la emisora de radio LT16 el dirigente de Confederaciones Rurales Argentinas, Juan Pablo Karnatz.
“Los problemas que acarrean las exigencias de la Unión Europea de impedir la exportación de productos que surgen de una deforestación posterior al 31 de diciembre de 2020, serán una piedra en el zapato, y es necesario establecer un amplio debate, realista, equilibrado pero sustentable”, expresó.
“Esta ley es un tema muy complicado”, señala el referente de CRA “Ni aunque tengas un campo desmotado el año pasado, con lo permisos debidos y todo legal, no vas a poder exportar por ejemplo una soja a Europa o una vaca que no esté tazado en un campo que ellos llaman “libre de deforestación”.
En tal sentido, aseveró que el apartado manifestando que ellos se reservan el derecho de aceptar la legislación de cada país, atenta contra la soberanía nacional porque tanto Brasil como Argentina estamos en zona amarilla casi roja por este tema.
UN ALTO COSTO PARA CUMPLIR LA MEDIDA
Es complicado porque ni siquiera tenemos canales diferentes de comercialización, indicó Karnatz “Por ejemplo, una soja del Chaco sembrada en un campo del 2022 que fue desmontado en esa época legalmente, no puede ser diferenciada de una del 2018 porque no hay canales de comercialización diferente. Tendrían que ser silos diferentes, cargas diferentes, y toda una complicación de logística que el país no está en condiciones de afrontar”.
“Estamos complicados y ya hoy noticias de algunos rechazos desde Europa. El problema es que esto se generalice y se extienda más allá en otros países”.
Todo el NEA y NOA, junto con Brasil estamos en observación constante. El tema de la certificación hoy en día está en manos de los exportadores, y eso solo los beneficia a ellos, cerró Juan Pablo Karnatz.
Este análisis es una falacia. No toma en cuenta que ya se desmontó 10 veces más superficie de lo que era aconsejable para nuestros suelos, biodiversidad y para la sustentabiidad de la producción. El autor se opone a una medida imprescindible para lograr los Objetivos de Desarrollo Sustentable.
Cuando la realidad les exiga comprar carne o soja no le van a mirar el pedigree. Es una medida para beneficio de los productores franceses.