Tras 19 años de retenciones, otra vez el estado toma una rueda de auxilio que es del campo
Pronunciamiento de la mesa técnica del grupo Agroperfiles sobre el Dolar-Soja
La mesa técnica del Grupo Agroperfiles se pronunció sobre el denominado dólar soja, indicando que “más allá de que el anuncio se lo dio como un gran impacto” a la liquidación de soja con un valor diferencial en el tipo de cambio para las operaciones de compra-venta de soja en $ 200 por Dólar desde el 05/09/2022 al 30/09/2022, no podemos dejar de ver solo hasta el 30 de septiembre”.
Es inquietante el modo en que se apeló a un producto del campo para tratar de resolver “un mientras tanto” que tranquiliza relativamente la economía con el ingreso de dólares por liquidación de la soja.
En el norte argentino no hay soja suficiente en poder de los productores, y solo la tiene los grandes acopios. Los productores sembraron, cosecharon, y la vendieron, porque la capacidad de acopio es casi nula, por tener necesidades urgentes para seguir operando con los cultivos que se vienen”, indicaron.
En el Chaco –señala la mesa técnica del grupo Agroperfiles—se sembraron 657.000 hectáreas de las cuales se trillaron 547.000 hectáreas a un rinde promedio de 2.600 kilos por hectárea, es decir, 1.422.200 toneladas de esta cosecha ya se comercializaron a valores inferiores de lo que ahora se establece, y con un dólar oficial y pagó los productos fitosanitarios, semillas y fertilizantes a valores del dólar blue.
“Es un parche, sin dudas, que al productor de esta parte del país, no lo favorece en nada, más allá que sea solo temporario a los fines de que ingresen dólares al país”.
“Las autoridades del Ministerio de Economía de la Nación deberían establecer parámetros más amplios para las economías regionales como ésta, donde también sembramos maíz, sorgo, algodón, girasol y otros cultivos”, indicó la mesa.
EL CAMPO VENDIO POR PROPIA NECESIDAD
El campo tiene que vender por necesidad propia y no por la del gobierno. El problema de los dólares es para seguir haciendo populismo. Por eso asignaron como fecha límite hasta el 30 de setiembre.
Los exportadores liquidaron el martes USD 330 millones, y eso implica la mayor venta de soja de los últimos cinco años.
Después de 19 años de retenciones, ahora, otra vez, el campo sale a auxiliar al gobierno.
Hoy son pocos los que pueden guardar soja de un año para el otro, dado que los gastos/insumos son mayores a los ingresos para los medianos y pequeños productores.
En segundo lugar si hay productores que pueden tener su reserva es porque se lo han ganado trabajando. En tercer lugar, jamás el Estado ayudó a un productor que perdió su cosecha por sequía u otro motivo, como se hace en la mayoría de los países que consideran con los hechos que el campo es el motor de la economía de un país. Ahí no preguntan cuánto necesitan para seguir apostando al país. Siempre están especulando con lo que ganan, jamás con lo que necesitan, apuestan o pierden.
El campo tiene puesta, siempre, la camiseta argentina. Lo que obtiene de rentabilidad, lo invierte en maquinarias, en tecnología, para seguir produciendo. Y si le va mal, se arregla como puede. Y en este septiembre de 2022, como pudo, le dio una goma de auxilio al Estado.