PERNIL: EL MENU MAS ELEGIDO PARA LAS FIESTAS
Además de barato, es rico. El pernil de cerdo es uno de los menú más elegido para estas fiestas de fin de año.
Considerado la opción más barata y cómoda para las fiestas, el pernil de cerdo dejó al cordero y al lechón en los siguientes puestos del ranking de consumo. El asado de vaca, en cambio, fue considerado “prohibitivo” por algunos comerciantes.
Se acercan las fiestas y los más precavidos ya comenzaron a planear las cenas de fin de año. Intentando combinar sabor y bolsillo, carnicerías consultadas por el diario La Capital de Mar del Plata y reproducido por el portal todocerdos y ahora por AGROPERFILES, aseguraron que los clientes se vuelcan a las carnes de cerdo, los cortes menos afectados por la inflación.
El pernil, en tanto, promete ser la vedette de las cenas de fin de año. Su valor rondará los $700 y los $1.500, dependiendo el peso y si se lo comprará “listo para el consumo”.
Según los comercios consultados por este medio, el consumo de carne de cerdo aumentó, en el último año y medio, entre un 30% y 35%, sustituyendo el consumo de carne vacuna, un clásico en las mesas argentinas.
Este cambio de hábito se debió a la diferencia de precio entre ambas opciones. “El cerdo siempre es entre un 20% y 30% más barato que la carne vacuna, dependiendo el lugar de venta”, explicó Jorge, dueño de una carnicería que desde el diciembre pasado comenzó a especializarse en la venta de carne de cerdo.
“La gente se había volcado al consumo de carne de cerdo por el precio de la vaca, pero también es una carne más sana y con menos colesterol”, agregó.
En cuanto a las expectativas frente a los pedidos por las cenas de fin de año, Jorge aseguró que este año se vivirá un “cambio de ecuación”.
“Hasta el año pasado, lo que la gente más compraba era cordero, lechón y pernil, pero este año el ranking creemos que será: pernil, cordero, lechón, carré de cerdo y pecho de cerdo”, explicó el comerciante.
Este último producto compite directamente con el asado de vaca por la similitud del corte y la capacidad de rendimiento. Sin embargo, la diferencia del precio puede inclinar la balanza ya que el cerdo estará entre un 30% y 35% más barato.
“Un buen asado rondará los $120, mientras que el pecho de cerdo estará entre un $90 y un $95”, sostuvo Jorge y agregó: “En algunos casos el asado es prohibitivo, si está a buen precio, generalmente, no es buen corte”.
En la misma línea se pronunció Oscar, dueño de una carnicería ubicada en la intersección de las calles Brandsen y San Juan, quien también aseguró que “en los últimos años, la gente eligió más el cerdo que la carne vacuna”, afirmación que se respalda en los más de 50 pedidos de pernil de cerdo que ya tiene solicitados para fin de año.
“El pernil explotó este año, hay mucho más pedidos que el año pasado”, expresó Oscar al tiempo que aseguró que esto se debe, también, a la comida del corte. “Un pernil listo para el consumo y para comer en sándwich estará cerca de $1.500, mientras que sin cocción estará alrededor de $700, dependiendo el peso. Es mucho más práctico”.
Ante la posibilidad de que el incremento en la demanda genere un aumento en los precios, Oscar se mostró confiado “No creo que vaya aumentar, porque estas fiestas el que se pase de vivo se va a quedar con la mercadería”.
Demostrando sus años en el oficio, Oscar brindó a todos los presentes curiosos una clase de cocina exprés sobre cómo cocinar el pernil.
“En un horno casero tiene una cocción de seis horas, se lo puede cubrir con savora, y si conseguís una jeringa veterinaria, se le puede poner jugo de limón y manteca. Le vas “inyectando” la mezcla a lo largo de la cocción para que no se seque. Y listo”expresó tentando a toda la clientela.