Luis Vuigner, productor algodonero de la zona de Pintos-Casares, en Santiago del Estero, confirmó anoche a Agroperfiles que por efecto de las derivas de productos hormonales que un vecino pulverizó, se vieron afectadas unas 900 hectáreas de algodón.
“Un desastre, y no podemos callarnos, por eso hicimos la denuncia, porque es imposible seguir así cuando se pone en juego todo un capital confiando en una buena campaña algodonera”, señaló el productor en dialogo con este portal.
Los productores que en sociedad estaban sembrando una superficie total de 3.200 hectáreas en dicha zona, a raíz de lo sucedido, se presentaron para hacer una denuncia ante la Comisaría Comunitaria N° 17.
Indignado por esta situación, Vuigner dijo el pasado 23 de noviembre, los serenos sintieron un fuerte olor característico de los productos hormonales por lo que acompañados de efectivos de la policía de Pinto, pudieron observar y constatar que una maquinaria pulverizadora conocida como “mosquito” perteneciente presuntamente a la firma Agroalimentos Armando estaba haciendo pulverizaciones en un predio que pertenece a la empresa Red Surco, que son los mismos dueños de la mencionada firma.
También habló con el programa Agroperfiles Radio el ingeniero agrónomo Adrian Korytko quien coincidió con su socio Vuigner que “lo que llama la atención es el uso en épocas en qué está prohibido la aplicación de estos productos donde el que mayor uso se da es el 2,4 D ya sea con aviones o con mosquitos”.
Por esta razón es que resolvieron hacer las denuncias correspondientes y hoy viernes, personal técnico del Ministerio de Producción de Santiago del Estero estarán en el lote para verificar los daños ocasionados por las derivas de estos productos hormonales.
“Les aconsejamos a los productores a hacer las denuncias ante estos casos, no podemos seguir perdiendo así, por la irresponsabilidad de unos pocos”, dijo finalmente Vuigner.