Los precios de la miel, a pesar de registrarse un aumento en el consumo, sigue con un estancamiento de los precios, y eso complica la rentabilidad de los productores apícolas chaqueños.
Para el asesor técnico de la Cooperativa de Productores Apícolas –COPAP- de Margarita Belén, Daniel Codutti, “hay una necesidad manifiesta de darle mucha importancia a la generación de valor de la miel”, dijo en declaraciones al programa Agroperfiles Radio.
“En su estado actual, la mayoría de la miel que se produce en el Chaco es miel oscura, que tiene un menor valor en el mercado internacional en comparación con la miel clara” dijo. Y explicó que mientras que un kilo de miel clara a granel puede venderse a 2.000 pesos, la miel oscura alcanza un precio de entre 1.500 y 1.600 pesos por kilo.
PRODUCTOS FRACCIONADOS
Ante esta situación, observa una gran oportunidad en el desarrollo de productos fraccionados, tanto para el mercado interno como para la exportación.
A ello, señaló que la provincia cuenta con dos plantas de fraccionado que cumplen con todas las normativas, “lo que permitiría comercializar miel chaqueña de alta calidad en todo el país”. Además, propuso que “el Chaco se presente como una provincia apícola en el mercado internacional, destacando sus productos tanto orgánicos como convencionales”.
EL ROL DEL ESTADO Y LA NECESIDAD DE DIÁLOGO
A pesar del potencial del sector apícola en el Chaco, Codutti expresó su frustración ante la falta de diálogo entre los productores y el Estado provincial. Mencionó que los apicultores “no tuvieron contacto directo con el Ministerio de Producción durante varios meses, lo que dificultó la implementación de políticas que podrían ayudar a superar las dificultades actuales”.
Para el productor apícola, “es esencial que el gobierno provincial apoye al sector no solo con asistencia técnica y económica, sino también facilitando el acceso a mercados internacionales y promoviendo el consumo de miel local”.
Por último, consideró que “el desarrollo de la apicultura orgánica y el fortalecimiento de los programas educativos son dos áreas prioritarias que requieren el compromiso del Estado”, finalizó Codutti.
