El dirigente ruralista Oscar Darío Muchutti analizó el impacto desigual de las últimas precipitaciones en el centro del Chaco y advirtió sobre la falta de políticas estructurales para afrontar las crisis climáticas.
En diálogo con Agroperfiles Radio, Muchutti trazó un panorama complejo para la actividad ganadera en el centro de la provincia del Chaco. Aunque las lluvias regresaron a la región, lo hicieron de forma muy desigual y en un momento ya crítico para la recuperación de las pasturas naturales.
“NO LLUEVE PASTOS”
“En la zona urbana de Machagai se registraron hasta 120 milímetros, y en mi campo, que está a 8 kilómetros, cayeron 85. Pero hacia el norte solo llovieron entre 10 y 15 milímetros. Fue general, pero muy desparejo”, explicó Muchutti. Si bien el agua trajo alivio a zonas que venían de casi un mes sin precipitaciones, la distribución y el momento en que se dio complican la recuperación forrajera.
“Es un poco tarde para las pasturas. Aunque uno siempre tiene esperanzas, estamos en otoño y el desarrollo natural ya es limitado. Los calores extremos fundieron todos los sembrados para forraje, así que ahora muchos están intentando sembrar trébol, avena o algo de alfalfa”, señaló el dirigente. Los campos naturales, por su parte, siguen en situación crítica.
UN PROBLEMA ESTRUCTURAL
Muchutti fue contundente al referirse al contexto estructural: “Tenemos un problema de base muy grande en el Chaco. La infraestructura hídrica no existe o está abandonada. Antes, el agua seguía su curso natural, pero con el avance humano y sin planificación, todo se fue alterando”.
En ese sentido, remarcó que los productores chaqueños, en su mayoría pequeños y medianos, no cuentan con el respaldo necesario del Estado para enfrentar las consecuencias de los extremos climáticos. “La ganadería intensiva de nuestra zona depende en gran parte de pasturas naturales. Hay opciones para incorporar nuevas especies megatérmicas, pero son procesos de mediano y largo plazo, que requieren apoyo y capacitación”.
“NO DAMOS VALOR AGREGADO”
También habló sobre la falta de aprovechamiento del valor agregado que podría tener la carne chaqueña producida con pasturas naturales: “En otras zonas lo usan como ventaja competitiva. Nosotros no supimos capitalizarlo, y vendemos como uno más. Eso también tenemos que revisarlo”.
La entrevista cerró con una reflexión profunda sobre la necesidad de una agenda realista que contemple la voz del campo: “Nos duele ver cómo pasan las campañas electorales y nadie habla de los verdaderos problemas. Mirá la ruta 95 antes de Tres Isletas: un bache monumental y ni un solo diputado, de ningún partido, salió a decir algo. Así estamos, por eso la gente está apática. Y con razón”.