Gallinas sin jaula: bienestar animal y huevos orgánicos
Cynthia Kaplan, cuando habla de producir en el campo, pone en primer lugar si se habla de animales, del bienestar necesario que deben tener, si se pretende alcanzar productos de calidad, “lo más natural posible, como siempre fue, como lo fue antes”, dice en diálogo con Agroperfiles.
Es que Cynthia junto a su esposo Martín Alonso, se dedican a la cría de ganado alimentado a pastos, en la zona de General San Martín, más precisamente en Selvas de Río de Oro, donde “tenemos una producción constante, de unos 50 maples de huevos semanales”
Pero a ello agregaron otra actividad a la que considera sustentable un cien por ciento: la cría de gallinas sin jaula, para producir huevos orgánicos.
“Nosotros no solo hacemos solamente gallinas ponedoras libres de Jaula, sino que las gallinas comparten un sistema de producción de carne totalmente a pasto y las gallinas vienen a complementar”, cuenta Cynthia.
Las gallinas ponedoras, en tanto, están ubicadas en gallineros móviles, “y no son sometidas al estrés del encierro permanente”.
Tienen un estado de permanencia libre todo el día, tienen sus lugares acondicionados para que ellas puedan ir y poner huevos, y que esos huevos no se contaminen y no se rompan, explica.
De este modo, en el campo, las gallinas caminan, pastan se revuelcan en la tierra, comen insectos, aparte alimento balanceado que aporta todo el abanico de nutrientes que necesitan, agua de calidad y cantidad.
“Las gallinas libres de jaula se basan primero en el bienestar animal”, aseguró, y uno de los principios básicos es “respetar primero los ciclos naturales las gallinas, que pierden las plumas, dejan de poner huevos y entonces hay una baja en el plantel, todo de forma natural”, apunta.
“NO LE PONEMOS FOCOS NI LAS ENCERRAMOS
Cynthia Kaplan comenta que “nosotros no le ponemos focos que las alumbren día y noche, no hacemos estímulos lumínicos, sabemos qué no es necesario modificar una estructura natural que alterará el comportamiento del animal, y preferimos respetar el ciclo natural y vemos que lo mismo producen en cantidad y calidad”, señala.
“Tenemos un producto de alta calidad y nos satisface que nuestros consumidores vuelven a insistir en la calidad que tienen nuestros huevos”, agrega.
MENOS GRASA, MENOS ESTRES
Cynthia y su esposo son médicos veterinarios y realizan los controles sanitarios y de calidad en todo momento. Asegura la productora que el huevo de gallina libre de jaula concentra menos cantidad de grasa mala en su yema, ya que las gallinas que caminan, y andan, metabolizan diferentes las grasas del alimento que concentran diferentes las vitaminas y minerales, por lo tanto los deportistas no necesitan desechar la yema del huevo y puede ser consumido”, asegura.
DONDE COMERCIALIZAN LA PRODUCCION
Los huevos lo comercializan en Selvas del Río de Oro, en Resistencia y en General José de San Martín “que también es donde tenemos nuestro domicilio familiar.
Cuentan que “hemos hecho operaciones con otros emprendedores y proveemos por ejemplo a una panadería de productos orgánicos, tenemos productos gastronómicos que también consumen deportistas”, dice.
HAY OTRAS OPCIONES A QUE TODO SEA INDUSTRIAL
Señala Kaplan que “la realidad es que hay un sistema de producción que está generalizado, y se cree que la única forma de producir es en dónde se industrializan los procesos que tienen que ver con los animales, exponiendo a los animales a una vida bastante extrema, muy por fuera de su comportamiento y sus ciclos naturales en las gallinas es un ciclo bastante cruel”.
No duda en decir que el sistema Industrial “se basa sobre rentabilidad y productividad” y que “las gallinas son expuestas a luz, donde hay cinco gallinas por jaula que están encerradas todo el día, comen, no caminan, no pastan, no acceden a ningún comportamiento natural, comen y ponen huevos en medio de un tremendo nivel de estrés”, aseguró.