¿Cuál es el panorama del negocio inmobiliario de compra, venta y alquiler de tierras en esa región y los valores actuales?, le preguntamos a Gonzalo Zalazar, un argentino, oriundo de Formosa, que vive desde hace 16 años en Paraguay, y desarrolla una intensa actividad vinculada con el rubro inmobiliario y la producción.
“Venimos de un año difícil en el sector inmobiliario rural debido a las condiciones climáticas que afectaron la región y los bajos precios en el sector cárnico y de granos”, contó a Agroperfiles.
Haciendo su base de trabajo en Neuland, una colonia de origen menonita, en el Chaco paraguayo, ubicado en el departamento de Boquerón Zalazar habla de la actividad y de las perspectivas para este año.
“Ahora hay mejores perspectivas—dijo—y actualmente está cambiando para mejor, dado que el hecho de que Paraguay haya alcanzado el grado de inversión, así como las obras viales proyectadas y las que se están llevando a cabo generan buenas perspectivas para el rubro agropecuario y se convierte en un atractivo para los inversionistas”.
En cuanto al alquiler de tierras se vio afectado por las mismas condiciones, situación que podría cambiar luego de los periodos de lluvia.
¿Cómo se encuentra el interés por el Chaco para el desarrollo productivo e industrial?, le preguntamos.
Existe un interés real y en aumento en ambos rubros, tanto productivo como industrial. La demanda se concentra en mayor parte en zonas aledañas a la Ruta Bioceánica y en zonas ubicadas sobre el Acuífero Yrendá. Además, Alto Paraguay, la cual se encuentra en zona de buen régimen pluviométrico.
LA VENTA DE CAMPOS
Con el panorama que enfrenta la ganadería y la salida de productores del rubro ¿Cómo se encuentra la venta de campos que pertenecían a ese rubro?
La mayoría de esos campos fueron alquilados para producción agrícola, aunque también mantienen la opción de venta del mismo.
Señaló que por lo general buscan campos con pasturas degradadas con cierto grado de estabilización de los suelos, otro factor importante en la región es el régimen de lluvia, la infraestructura vial de acceso al campo y de servicios como la electricidad.
LOS PRECIOS
El incremento de los precios no aumentó considerablemente debido a las condiciones mencionadas más arriba.
Actualmente el precio oscila entre USD 100 a 120 por hectárea por año, existiendo la posibilidad de implementar pagos sobre rendimientos.
INTERES INVERSIONISTA
Gonzalo Zalazar indició que “sentimos el aumento de interés, aunque en el sector agropecuario de la región aun no se vea reflejado con la compra de propiedades, debido a otros factores burocráticos para el desembarque de dichos inversores”.
Habló además sobre la infraestructura vial y de servicios señalando ante la pregunta de Agroperfiles que aumenta el valor de una propiedad a la hora de ofrecer la misma, pero la realidad es que en ese sentido estamos muy atrasados en lo que refiere a la región. Tenemos el anhelo de que esa situación se pueda revertir a corto plazo para mejorar las condiciones tanto de la población como del sector, dijo.