ALGODON: BOCHAS SANAS, PERO DESCOMPUESTAS – Analizan si se debe a hongos o bacterias.

Fotografías compartidas por el productor Ernesto Ivan de La Tigra, en las que muestra bochas en total estado de descomposición, motivó un interesante intercambio de opiniones de productores y técnicos en el Grupo Agroperfiles Algodonero.

Es que según los reportes de los últimos días, y cuando la mayoría de los productores están ocupados en el combate contra el picudo del algodonero, se han visto ataques de lo que podrían ser chinches o bien otros factores.

“Se encuentran bochas en este estado.  A simple vista no se ve perforada o dañada, pero sí están podridas adentro”, señaló “Lalo” Ivan.

“Tenemos bochas sanas, enteritas pero podridas”, comentó Sergio Struss de la zona de Las Breñas, como también Denis Konsimal de Bajo Hondo, que recorrió el lote junto a la ingeniera Andrea Kobelak para observar la evolución del cultivo.

Si no hay daños por insectos  puede ser entonces que haya pérdida de hermeticidad en las suturas de las cápsulas y posterior ingreso de hongos, alertó el ingeniero Ivan Bonacic Kresic, del INTA Sáenz Peña.

Tecnicos como Martin Canteros, consideran que esto podría ser producido por hongos lo que provoca ese color, pero, ¿Cómo entraron?”, se preguntó.

COMO PODRIAN INGRESAR A LAS CAPSULAS

Bonacic Kresic compartió un estudio como aporte a la discusión y para aclarar un poco el asunto de las podredumbres de cápsulas (al menos desde el punto de vista patológico).

La superficie de las cápsulas se encuentran cubiertas por esporas de hongos y bacterias (patógenos primarios y secundarios u oportunistas – estos últimos no pueden ingresar al fruto por sí mismos, necesitan puertas de entrada), entre otros microorganismos, en tanto que en su interior se encuentra tejido (fibras y semillas en formación) con abundante agua, azucares y otros compuestos.  Normalmente la cápsula es hermética y no permite el ingreso de esos microorganismos oportunistas, indicó el técnico del INTA.

Cuando por cualquier causa se pierde esa hermeticidad (heridas – no superficiales – por insectos, por factores del ambiente – granizo por ejemplo, o anormalidades en el crecimiento de la misma) esos microorganismos se ven estimulados a germinar e ingresar al interior de la cápsula provocando la invasión de esos tejidos y la consecuente podredumbre (generalmente interna – no se ve hasta que empieza a abrir).

Agregó Bonacic Kresic que  también hay hongos y bacterias capaces de ingresar a las cápsulas por las paredes carpelares, brácteas y pedúnculo de la bocha cuyo daño se puede observar a simple vista (patógenos primarios).

AFECTA EL CLIMA?

Sí –respondió Ivan Bonacic Kresic–, juega un rol importante en varios aspectos. Las pérdidas anticipadas de hermeticidad en frutos en formación por fisuras en las uniones de los carpelos (por donde luego, al madurar, se abrirá la cápsula y formará el capullo) son más comunes de lo pensado (y al principio difíciles de detectar a simple vista), especialmente cuando ocurre un crecimiento anormal o abrupto estimulado por algún factor que ocurre en determinado momento (por ejemplo ambiental).

Por otra parte, también relacionado con el ambiente, cuando la cápsula está próxima a madurar y empieza a abrir (inminente pérdida de hermeticidad) es fundamental la rápida deshidratación de los carpelos para que se forme un capullo sano y normal. 

Si por algún factor (nubosidad prolongada, excesiva humedad, exuberante follaje, etc) este periodo se prolonga y se demora la apertura y formación del capullo, es muy probable que los micrrorganismos, principalmente hongos, colonicen los tejidos internos, aún con elevada humedad, y ganen la carrera provocando lo que conocemos como podredumbre externa (las cápsulas se tornan rosadas, negras, se ven momificaciones, entre otras cosas).

EL MONITOREO DE PLAGAS ES IMPORTANTE

La ingeniera Marita Simonella, del INTA Sáenz Peña, indicó que desde el punto de vista de las plagas, ocurre a veces que el daño provocado por ejempo por  las chinches (picaduras de las mismas), no se alcanza a ver en el exterior de la pared de la cápsula y sin embargo el daño está ya aconteciendo dentro de las cápsulas y claro, no se lo conoce hasta tanto llama mismas no sean examinadas (abiertas).

Por eso, se recomienda con tanta insistencia el monitoreo de las plagas en el cultivo: para poder ver de manera oportuna cualquier tipo de plaga que aparezca y en principio, cuando es necesario, poder tomar las medidas de control más adecuadas, y por otro lado, nos queda el antecedente de la presencia de la plaga y los daños que consecuentemente podemos llegar a detectar en los próximos días.

Añadió que se han dado casos de daño provocado por esta chinche, la tintorea, en que no se observa la picadura afuera de la bocha pero sí está el daño por dentro de la cápsula

MAS DE 40 GENEROS DE HONGOS Y BACTERIAS

En Argentina, se han identificado más de 40 géneros entre hongos y bacterias que participan en el deterioro de los frutos del algodón, y la utilización de fungicidas foliares para el control de este problema no resulta muy efectivo, por lo que hay que lograr un buen mojado de la bocha, entre otros factores, indicó Bonacic Kresic

LA LECTURA DE LAS FOTOS DE IVAN

Volviendo a la foto de Lalo Ivan, si tenemos como.ejemplo, algodon a 0.52 mts y 10 plantas por metro lineal, podemos hablar de 90 a 110 bochas como ideal, que crecieron  en 45 días aproximadamente desde la primera que se formó hasta la última.  Si es un ataque de chinches, contado tarde  cual es el porcentaje afectado ? Si es controlado a tiempo seguro será bajo suponiendo que es chinche el problema, indicó Martín Canteros

.Ahora—agregó–si suponemos  que es ambiental, entonces provoca la ruptura de la hermeticidad para dar lugar a entrada de patógeno, no todas las bochas esta  expuestas a ese momento especial…todo es dinámico y las bochas no están todas en el mismo tamaño cuando ocurre el evento, de ataque de insectos o extremos climáticos, manifestó.