Advierten que “la industria aceitera Argentina va en vías de desaparición, si antes no reaccionamos”.
El analista de mercados, docente de la Facultad de Agronomía de la UBA e ingeniero agrónomo de profesión, Javier Preciado Patiño, tuvo una larga charla con el programa Agroperfiles Radio donde habló de diferentes temas relacionados a la actualidad del sector agrícola argentino.
“Tenemos un problema gravísimo que tiene que ver con la industria aceitera, básicamente la de soja”, dijo, destacando que Argentina es líder global en exportación de aceite y de harinas de soja, básicamente porque todo lo que se produce, se procesa y se sube a un barco en el Gran Rosario y va con destino al exterior.
Ahora –explicó Preciado Patiño–por la política de biocombustibles, Estados Unidos Estados Unidos está incrementando la capacidad de molienda de soja de una manera vertiginosa.¿ y por qué? Porque ellos vuelcan el aceite para hacer un producto superior al biodiesel y luego se preguntan a donde exportan la harina de soja, y las mandan a los mismos destinos nuestros, Filipinas, Indonesia, Vietnam, y acá, a tiro de piedra, tenemos a Brasil que viene creciendo mucho en molienda.
Entonces –dijo–si no hacemos algo, la industria aceitera Argentina va en vías de desaparición , literalmente, y no es una exageración, y entonces nos preguntamos cuáles serían las posibles soluciones.
En este tren, dijo que “sería tener una política activa de igualar la retenciones con maíz y trigo; en segundo lugar, tener un programa que estimula el productor a hacer un buenas prácticas agrícolas, y propiciar el uso de semilla certificada, utilizando buena fertilización si fuera necesaria”.
Pero—recalcó el especialista– hay un tema que es clave, y que es aumentar el corte interno del biodiesel, porque de esta manera, jugas fuerte y creas una demanda interna llevándolo al 15% y eso demandaría 900.000 toneladas más de aceite. De esta manera, las sacas del mercado internacional, mejoras los precios y le das posibilidad a la industria aceitera de pagar un poco más.
Ingeniero Agrónomo de la Universidad de Buenos Aires. Ex Subsecretario de Mercados Agropecuarios.
EN EL CONGRESO
Recordó que en el Congreso la semana pasada se discutió eso con invitados de la Cámara de biodiesel, representantes de las provincias y otros actores. “Pero lo que no veo es que se tome conciencia de la realidad, porque tenemos que advertir que nuestro principal complejo exportador se va a pique, y la pregunta es: hacemos algo o dejamos que toco caiga?”, se preguntó.
Javier Preciado Patiño consideró que la discusión “subterránea con este tema frena todo intento de avanzar con el proyecto, es una cuestión seria, que no implicará costo fiscal pero no lo van a tratar en el Congreso, será un milagro si asi lo sucede”, dijo a Agroperfiles.
Entonces, dijo, es notorio ver que como la política no tiene la generosidad de hacer algo en pos de los intereses del país, sin importar si este proyecto vino de este lado, o del otro o si va a traer un costo fiscal y todo este círculo vicioso genera mucha bronca porque no se tratan con la importancia que estos temas tienen, expresó.
Javier Preciado Patiño no dudó en decir: “A veces, la lógica de la política juega en contra del interés nacional”.
Recordó que estuvo como subsecretario de mercados dos años en el gobierno nacional, y que cuando salió de la función pública, “seguí explorando los vínculos que hay en los mercados globales y la Argentina, y descubrí que al mercado les importamos mucho más de lo que pensamos nosotros”.
No somos jugadores marginales. En el mercado global hay quienes están expectantes si en la Argentina se sacan o no las retenciones. Si llueve y pueden sembrar y al final del día termina repercutiendo en los precios que es la señal que el productor espera ver, indicó.
Arm+p una buena red de contactos, Vietnam,, Singapur, pakistan, China, Ucrania, Estados Unidos, Brasil, lo que trato de hacer es mostrar cómo funcionan esos vasos comunicantes, y como vuelve eso para nosotros, la Argentina.
UCRANIA Y EL GIRASOL
Dijo en la entrevista que “va a aumentar el área sembrada de girasol, una campaña que muestra en la zona núcleo un aumento, por precios, y por la chicharrita del maíz, más de 2 millones y medios de hectáreas –dos años seguidos con exportación de un millón de toneladas aceite de girasol y harina de girasol.
Ucrania es el principal productor mundial de girasol, y recordó en este contexto que el girasol llegó a la argentina traído por inmigrantes judíos de esa zona de lo que era Rumania, cuando llegaron a Carlos Casares, por eso es la capital nacional del girasol, hoy casi no se planta pero esa la historia
Ucrania este año tendrá una producción girasolera un poco menor que años anteriores, que alcanzará unos 12,5 y 13 millones de toneladas (la Argentina en el mejor de los casos produce 4 millones, como dato a tener en cuenta), y en esta ocasión Ucrania no exportará como años anteriores, contra los 16 millones del año pasado.
La exportación tuvo en cantidad 16 millones y ahora caerá en 12,5 y de toneladas, cuando se está terminado la cosecha en Ucrania. Observó el especialista que los precios muy buenos para el productor,. Casi el mismo precio que está recibiendo el productor argentino, señaló.
Destacó que el año pasado se redujo el derecho de exportación al girasol 5% por la harina, y 7% por el aceite, no es una retención que mueve el amperímetro, no como 33% de la soja.
SOBRE LAS RETENCIONES
Ante una pregunta de Agroperfiles si ve muy lejana la posibilidad de la quita de retenciones como se había anunciado en algún momento, Preciado Patiño dijo que “es necesario arrancar pensando que cuando asumió el gobierno de Milei, Caputo propuso llevar todo al 15% en forma masiva y los productos del complejo soja de 31 a 33 o sea la idea original era aumentarlos y entonces como la cuenta del almacenero menos gastos más ingresos como la cuenta del almacenero”.
Si se aborda el tema de los derechos de exportación, y se baja en algunos puntos, les ayudaría mucho que otros sectores empiecen a exportar y generar divisas, porque es evidente que la mirada está puesta en sostener el equilibrio fiscal.
EL NEGOCIO ES PARA EL ACEITERO
Ante una consulta si será beneficioso para el productor exportar el girasol sin industrializar, Preciado Patiño respondió que rotundamente no, “porque del año pasado a este año la exportación de semillas de girasol, de 300.000 toneladas va a pasar a prácticamente cero”.
Pero como el precio es bueno, se cierra bien el número al aceitero y creo que acá va a pasar lo mismo. Es muy poquito lo que se está registrando de exportación de semillas, porque el negocio es molerlo, ya que el margen de la molienda son unos 20 dólares por tonelada y como Crushers se pelean por cada kilo de girasol.