El productor alfalfarero de Colonia Necochea, zona de Las Breñas, Germán Sanko, compartió un panorama detallado sobre la situación actual de la producción de alfalfa en la región, en diálogo con Agroperfiles Radio.
Sanko explicó que las últimas lluvias permitieron preparar lotes y sembrar nuevas superficies de alfalfa. Sin embargo, aclaró que no se logró recuperar la superficie perdida durante la fuerte sequía que afectó a toda la provincia.
“La alfalfa no quedó exenta de los daños que sufrieron la soja y el maíz. Muchos lotes que llevaban un año de producción se secaron prácticamente en su totalidad”, señaló.
Respecto al futuro cercano, el productor se mostró moderadamente optimista: “Las alfalfas nuevas van a dar una buena producción en invierno, pero no sé si alcanzarán a cubrir toda la demanda”, advirtió.
LA ALFALFA COMO ALTERNATIVA PARA EL PEQUEÑO PRODUCTOR.
Sanko destacó el potencial de la alfalfa como una opción rentable y sostenida para productores medianos y pequeños, que encuentran crecientes dificultades para mantenerse en la agricultura tradicional. “Hoy, para un productor de 200 o 300 hectáreas es muy difícil dedicarse al cereal. La rentabilidad es muy chica”, afirmó. En contrapartida, remarcó que la alfalfa ofrece mayor continuidad y mejores márgenes.

“Todos los años, en algún momento, hay mucha demanda de alfalfa. Para mí, es una muy buena alternativa para el productor que quiere seguir en el campo pero no encuentra rentabilidad en los cultivos tradicionales”, sostuvo.
OPORTUNIDADES DE EXPORTACIÓN Y DESAFÍOS LOGÍSTICOS.
Consultado sobre la posibilidad de exportar, Sanko confirmó que hay demanda internacional, especialmente desde Brasil, pero advirtió que las operaciones son complejas: “Hoy hay compradores del exterior, pero la logística es complicada. Se está haciendo difícil vender directamente de productor a productor. Generalmente, las empresas exportadoras ya tienen todo más aceitado”.
ORGANIZACIÓN Y APOYO INSTITUCIONAL
Sobre el trabajo colectivo y la organización de los productores de alfalfa, Germán recordó que en el pasado existió un registro provincial y algunas gestiones para obtener apoyo gubernamental, pero lamentablemente “todo quedó en promesas” y los beneficios no llegaron de manera equitativa.
Subrayó que sería importante reimpulsar la organización desde el llano, fortaleciendo la autogestión de los productores y buscando apoyo institucional para acceder a líneas de crédito accesibles.
UN CRECIMIENTO SOSTENIDO EN LAS BREÑAS.
A pesar de las dificultades, Germán Sanko resaltó el crecimiento de la producción de alfalfa en su zona. “Cuando arrancamos éramos dos o tres productores. Hoy ya somos más de quince o veinte en Las Breñas, con lotes de 15 a 30 hectáreas. Cada año hay más gente que siembra un poquito más”, celebró.
Aunque reconoció que el proceso es lento, se mostró esperanzado: “Los resultados se ven. No al ritmo que uno quisiera, porque no es fácil cambiar de un día para otro de girasol a alfalfa, pero vamos avanzando”.
Para finalizar, Sanko remarcó la necesidad de seguir incentivando alternativas productivas que permitan a los productores mantenerse en el campo: “Competir en soja o maíz es muy difícil. Hay que ir buscando nuevas opciones, y la alfalfa es una de ellas”.