La Administración General de Aduanas de China anunció la prohibición de importación de rollos de madera estadounidenses, alegando motivos fitosanitarios. Según las autoridades chinas, la medida busca «proteger la sanidad agraria del país ante posibles plagas y enfermedades».
En un nuevo capítulo de la disputa comercial entre China y Estados Unidos, la Administración General de Aduanas de China anunció la prohibición de importación de rollos de madera estadounidenses, alegando motivos fitosanitarios.
La decisión, que podría mantenerse en el tiempo, genera incertidumbre en el comercio global de madera, ya que redirigiría exportaciones por un valor aproximado de 850 millones de dólares anuales que actualmente tienen como destino el mercado chino.
Según las autoridades chinas, la medida busca «proteger la sanidad agraria del país ante posibles plagas y enfermedades».
Pero la restricción llega en un contexto de creciente tensión comercial entre ambas potencias, luego de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenara el 1 de marzo una investigación sobre las importaciones de madera, lo que podría derivar en la imposición de un arancel del 25% a estos productos.
IMPACTO EN EL COMERCIO DE MADERA
Pese a la caída en sus importaciones de madera desde 2019, China sigue siendo un actor de relevancia en la foresto-industria. En 2024, adquirió 74 millones de metros cúbicos de troncos y productos madereros, por un valor total de 13.000 millones de dólares.
Analistas internacionales consideraron que las guerras comerciales no solo afectan los aranceles, sino que también imponen restricciones no arancelarias con repercusiones significativas en el comercio mundial. Si bien las medidas para controlar las plagas son cruciales para la bioseguridad, este embargo crea desafíos significativos para los exportadores estadounidenses. La prohibición pone de relieve la importancia de la diversificación y la adaptabilidad frente a los cambios en las políticas comerciales y los entornos normativos.
En sus redes sociales, el director de Greenfield LLC, Gregorio Aznarez, destacó que la prohibición representa un desafío para los exportadores estadounidenses, al tiempo que enfatizó la importancia de la diversificación y la adaptabilidad ante cambios en la política comercial.
TENDENCIAS DEL MERCADO CHINO
En 2024, las importaciones de troncos y madera en China cayeron un 4,4% interanual, hasta los 74 millones de metros cúbicos, con una disminución del 1,5% en términos de valor. La desaceleración económica del país y el exceso de inventario en el sector inmobiliario explican en gran parte esta contracción.
Las importaciones de troncos totalizaron 36 millones de metros cúbicos (-5,1% interanual) por un valor de 6.000 millones de dólares, mientras que las de madera aserrada alcanzaron los 27 millones de metros cúbicos (-3,8%), aunque su valor aumentó ligeramente a 7.000 millones de dólares (+0,3%).
China sigue dependiendo de proveedores clave como Nueva Zelanda, Canadá, Alemania y Polonia para su abastecimiento de troncos de madera blanda, mientras que Rusia y Tailandia lideran en el suministro de madera dura. En este contexto, la demanda de maderas especiales y de alto valor se mantiene estable, con oportunidades emergentes en los sectores de muebles y diseño de interiores.
A pesar de la incertidumbre generada por las restricciones chinas, los expertos coinciden en que la industria maderera global deberá buscar nuevos mercados y estrategias de adaptación. Con el sector de la construcción chino en declive, las miradas están puestas en el crecimiento de segmentos alternativos, como la producción de muebles y materiales para diseño interior.
El embargo chino sobre la madera estadounidense podría marcar un punto de inflexión en el comercio internacional del sector, impulsando una reconfiguración en las rutas de exportación y forzando a los países productores a diversificar sus destinos comerciales.