Por Walter Brown, Jefe de Redacción de El Cronista
Es lógico observar que el verano trae consigo una importante suba de la temperatura en esta parte del mundo. En particular cuando los ánimos se caldean por cuestiones políticas, como ocurre en Venezuela, con la oposición y la comunidad internacional denunciando un golpe de Estado contra Edmundo González Urrutia y Corina Machado, Estados Unidos subiendo el monto de recompensa por la captura de Nicolás Maduro y el chavista emitiendo flamígeras declaraciones contra Javier Milei, a quien acusó de encabezar un movimiento de extrema derecha que quiere “imponerle un presidente a Venezuela” y lo tildó de “nazi, sionista y sádico social”.
Pero más allá de las cuestiones políticas, cuando la temperatura aumenta, el mayor impacto es socioeconómico. Basta con observar los estragos del calentamiento global, luego de atravesar en 2024 el año más cálido desde que hay registros y arrancar un 2025 con escenas más que preocupantes.
De hecho, mientras el mundo observa desde hace varios días como las llamas consumen Los Ángeles y se expanden por una California que padece de sequía extrema, los argentinos nos enfrentamos a las agobiantes temperaturas que amenazan en estos días a gran parte del país y encienden la luz de alerta en el campo, una preocupación que se extiende al principal beneficiario de la actividad agraria, las arcas de un BCRA que aprovecha para comprar dólares mientras la oferta está presente pero que todavía tiene mucho por recorrer para que las reservas netas dejen de estar en terreno negativo.
El domo de calor que eleva el termómetro por encima de los 40″ en diversas provincias, sumó una preocupación más a un sector que espera por las lluvias para garantizar que las cosechas venideras no volverán a ser víctimas de la sequía que tanto golpeó hasta 2023.
Como muestra de ello, la Bolsa de Comercio de Rosario ya advirtió que mientras que hace un mes “el maíz en la región núcleo apuntaba a una gran campaña”, la falta de lluvias desde mediados de diciembre dio un vuelco negativo a la situación . Así, hoy casi la mitad del maíz temprano se encuentra de regular a malo, mientras que la soja también está sintiendo el impacto de la escasez hídrica.
Mala señal para un país que necesita dólares y, en particular, un sector que agita el reclamo de reducción de retenciones para paliar el combo de costos en alza y precios en baja, con un dólar blend que deja de ser un paliativo, ante el achatamiento de la brecha.
Pero si el servicio meteorológico acierta con su pronóstico, el alivio llegará el próximo fin de semana, cuando el cambio de viento hacia el sur y la entrada de aire patagónico rompa el bloqueo atmosférico, lo que traerá consigo las esperadas precipitaciones que rieguen los campos y ayuden a moderar las altas temperaturas.
Para entonces, Milei ya se encontrará en el frío de Washington, hacia dónde partirá el viernes para asistir a la asunción presidencial de Donald Trump acompañado del ministro Luis Caputo, quien probablemente se de una vuelta por el FMI, aprovechando los elogios dispensados por Kristalina Georgieva que avivaron la llama de un acuerdo. “El caso más impresionante en la historia reciente es Argentina, donde los efectos han sido profundos, con la implantación de un sólido programa de estabilización y crecimiento”, dijo la titular del Fondo, lo que dibujó una sonrisa en el equipo económico que ya da casi por hecho el nuevo acuerdo, con desembolsos incluidos -se habla de u$s 11.000 millones-. La buena relación de Milei con Trump parece haber tenido un rápido efecto en el organismo financiero.
Desde Estados Unidos, el Presidente estará atento a las negociaciones que Santiago Caputo y Guillermo Francos llevarán adelante para encarrilar las sesiones extraordinarias, que terminarán de convocarse hoy con la publicación en el Boletín Oficial.
El temario tendrá un contenido netamente político, como la eliminación de las PASO -la UCR y el PRO solo accederían a suspenderlas-, la puesta en tratamiento de los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla como candidatos a la Corte Suprema y el renovado proyecto de Ficha Limpia, con el que espera congraciarse con Mauricio Macri, en el marco del ida y vuelta que protagonizan en torno a una posibile alianza para encarar las elecciones legislativas.
¿Se concretará ese acuerdo o irán con listas separadas? ¿será Macri candidato? Mariano Beldyk nos revela hoy algunas señales de lo que ocurre y lo que vendrá. Por lo pronto, el jefe de Estado se abocará a seguir de cerca el juego político dentro y fuera del Congreso -más fuera, porque al menos el recinto de Diputados estará cerrado hasta febrero por refacciones-, luego de atravesar con éxito el desafío económico de cumplir con el pago de 4351 millones de dólares en deuda reestructurada, observar cómo el riesgo país se hundía por debajo de los 600 puntos, pelearse con Domingo Cavallo por el nivel del tipo de cambio y comprobar el dato de inflación oficial que se conocerá este martes.
Si no supera el 2,5%, el BCRA bajaría el ritmo de devaluación mensual, aunque el consenso de las consultoras privadas proyecta que la temperatura de los precios aún está un poco por encima de esa marca. Y claro, son días calientes…
