Paquito Ruiz: un horticultor de ley, sabio, paciente y con mucha historia
Tiene 66 años y lleva en sus espaldas muchas historias. Es un horticultor de ley. Años atrás, tenía su puesto de venta de frutas y hortalizas sacadas de su chacra de la Colonia El 44.
“Lleva con orgullo la rastra con las iniciales de su madre, sombrero de paño y el trenzadillo en cuero, botas corrugadas, el poncho de Martín Miguel de Güemes que se usa como estandarte por estos lados.
La camisa y la bombacha tableada las hace una modista local y seguirá siendo así dice él ya que estas pilchas no se compran hechas, cada gaucho tiene su impronta. Susana, mi madre, Susana Hrubik, le hace el nudo del pañuelo y lo pone frente al espejo”, cuenta su hija Alina.
Paquito Ruiz, Andrés Octavio Ruiz, no es de quejarse. Más bien, le apunta a seguir produciendo con lo que tiene a mano. Habló con Agroperfiles Radio al costado de su quinta luego de tener seleccionada la verdura, y dice que “sería bueno que muchos horticultores puedan producir más”.
Dice que “si una familia tiene un pedazo de tierra para sembrar, no puede haber desnutrición ni hambre. La tierra dá la comida”, sostiene.
Con unas 20 hectáreas saca lo mejor de la tierra: sandias y melones de alta calidad que se envían a otras provincias argentinas y también abastece al mercado local. Apuesta por esta actividad aunque tiene sus sinsabores, pero que tiene un corto periodo entre la siembra y la cosecha, y de esta manera lograron sacar sus productos a la calle, de manera rápida, con buena calidad.
La sandía y el melón es un producto muy requerido por los consumidores. De acuerdo a la calidad y al tamaño. Logró obtener semillas de productores de Chile, país al que visitó a partir de haber sido elegido por Bayer para hacer un lote demostrativo de sandías décadas atrás.
VENDÍA FRUTAS Y VERDURAS A LOS 12 AÑOS
Paquito, cuando tenía 12 años, vendía en un canasto frutas y verduras por las calles de Castelli. Luego, siendo joven, ya junto a su compañera de la vida, comenzaron a sembrar todo tipo de frutas y hortalizas.
Así fue conociendo a técnicos y potenciales compradores y en la actualidad tiene 20 hectáreas en las que siembra sandias, melones como el “rocío de miel”, que es claro, muy dulce y jugoso, con piel lisa, firme y buena adaptación al transporte, con una adecuada conservación de poscosecha. “Acá vienen de Resistencia y de Santa Fé y me llevan por cajones porque los usan para gourmet”, dice.
El lote lo completa con zapallitos papas, zucchinis, zapallos inglés y japonés, y también se dedica a la apicultura.
UNA TAREA DEL DÍA A DÍA
Paquito con su familia , ante la situación que originó la sequía en los últimos años, se vió obligado a buscar alternativa y puso en marcha un sistema de riego por goteo en su lote.
Eso le va a generar mayor certeza en cuanto a lo que pueda tener de producción. Tiene fuente de buena agua subterránea y ya lo tiene en pleno funcionamiento.
Paquito ahora se queda más tiempo en el campo, descansando, su familia lo cuida que no haga trabajos en los horarios de mucho sol. Lo que produce vende en distintos lugares, y en la ciudad de Castelli tiene una verdulería atendida por su hijo.
“Así estamos cada día, en plena actividad pero haciendo lo que nos gusta, porque vivimos de esto y es nuestra pasión”, le cuenta a Agroperfiles desde donde vive en la estancia Don Miguel, Colonia el 44
Gracias Hipólito por estar pendiente y siempre siendo la voz del productor.