El paro en el norte tiene gran adhesión
“No vamos a vender hacienda hasta que no se abran las exportaciones”, dice un productor de la zona de Los Juríes, Santiago del Estero, mientras en la zona de Quitilipi y Machagai los ganaderos cerraron tranqueras, y se adhirieron a la protesta contra el cierre de las exportaciones de carnes vacunas por 30 días dispuestas por el gobierno de Alberto Fernández.
Se van sumando instituciones no solo ganaderas sino también de otras actividades vinculadas a la agricultura.
El freno a las exportaciones de carne vacuna impuesto por el gobierno nacional, generó la reacción de todo el sector ganadero que fue contundente al adherir al paro de comercialización, inclusive país adentro, porque consideran que “la medida implementada por el Estado no tiene lógica”, dicen los ganaderos.
Las voces desde el norte del país, como región que viene trabajando para aumentar la producción ganadera, también se hacen escuchar, remarcándose que “en Argentina, el quince por ciento de la faena total se exporta y de ese porcentaje el setenta por cien corresponden a cortes que no se consumen en el país”.
“El mayor porcentaje, de ese quince por ciento de la faena, que se vende al exterior es vaca manufactura, vaca conserva y todos los cortes del descarne de los huesos que son demandados por China y Rusia”, detalló Eric Lipps, consignatario de hacienda de la firma Madelán.
A los datos aportados, se añadió que “los valores que se pagan por esas categorías, que no son parte de la mesa del argentino, son similares a lo que se paga por un animal más tierno que es el que se consume localmente”. “No pueden justificar desde el Gobierno, que se frena la exportación porque incide en el precio de faena local. Es ridículo el fundamento porque, casi el total de lo que se vende al exterior, no tiene cabida en la mesa de los habitantes de este país”, indicó.